Nuestra estadía en la Posada Solar da Ferradurinha (Búzios).

La Posada Solar da Ferradurinha es una una casona muy pintoresca, con un ambiente muy relajado y agradable. Se encuentra en una zona muy tranquila de Búzios a pocos metros de las playas Ferradurinha y Geribá y a su vez alejada del bullicio del centro, aproximadamente a unos 10 minutos en auto de distancia.

Es atendido por su dueña Eloana: una persona muy agradable, siempre atenta a nuestras necesidades y dispuesta a conversar y responder cualquier duda o inquietud. 

Llegamos a ella a partir de las buenas calificaciones recibidas, reservándola desde la página de Agoda ya que nos pareció una interesante opción teniendo en cuenta precio-calidad.

Infraestructura.

La calle que da acceso a la posada es bastante empinada por lo que se dificulta el ingreso de personas con dificultades para caminar y las maniobras para guardar el auto (solo lo hicimos al llegar, después lo dejamos en la calle). 

Cuenta con un estacionamiento con capacidad para dos autos; no obstante, se puede aparcar en las inmediaciones sin ningún tipo de inconveniente o peligro.

Pasando el pequeño patio de la entrada, hay un sector semicubierto con sillones para descansar, mesas y sillas que resultan ser parte del lugar en donde se sirve el desayuno por las mañanas.

Desde allí, se accede a un ambiente amplio e iluminado donde se encuentra la cocina integrada y una sala de estar que cuenta con unos sillones muy cómodos y un gran televisor para disfrutar.

En esa misma planta se ubican dos habitaciones y subiendo la escalera hacia la planta alta se puede acceder a una habitación más que cuenta con balcones y hermosas vistas. Desde allí ver el atardecer con el mar de fondo resulta muy agradable.

Saliendo de la propiedad e ingresando por una puerta lateral nos encontramos con un pasillo y al fondo el acceso a tres habitaciones restantes. 

Para nuestra estadía, reservamos dos habitaciones: ambas contaban con una cama matrimonial y una cama individual. Baño con ducha, heladera, aire acondicionado y TV. Las instalaciones son cómodas, simples, amplias y funcionales además de poseer una decoración muy bonita.

Servicios.

El acceso a internet vía wifi funciona en las áreas comunes y en las habitaciones de la planta baja de la casa. No ocurre lo mismo en las habitaciones que se encuentran en el acceso lateral donde no es posible lograr la conexión al wifi.

El servicio de limpieza se hace a diario y es completo. Las camas las arman todos los días junto con la limpieza del baño y el cambio de toallas.

En cuanto al desayuno es súper completo: variedad de frutas, panes, huevos revueltos, fiambres, budines y  demás cosas dulces. También hay una variedad de jugos frescos, que varía todos los días. En la propia posada elaboran casi todo lo que se ofrece en el desayuno y lo hacen las chicas que trabajan allí. Durante nuestra estadía, dos de ellas eran argentinas. Muy amables y serviciales.

Para el horario de la merienda hay café, té y galletitas disponibles para servirse en la sala de estar.

La posada no ofrece servicio de media pensión, por lo que para el almuerzo y/o cena se deberá ir a comer al centro o traer comida a la habitación. Pueden contar con la ayuda de su dueña que, en nuestro caso, una noche nos hizo el favor de encargarnos unas pizzas por teléfono. 

Calificación.

Es un hospedaje que recomendamos sin dudarlo por las cercanías respecto de las playas Geribá y Ferradurinha, la amabilidad de su anfitriona y la calidad de los servicios que brinda. Pero aconsejamos contar con un auto alquilado para la movilidad ya que para ir a cenar al centro, ir a un supermercado o recorrer otras playas de Búzios queda bastante alejado si se quiere ir a pie.

 

Links de interés:

 

Créditos de las fotografías: Agoda.com

 

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